Armenia

Ayer conocí a una chica que va a la facultad con migo a través de otra chica con la que cursé algunas materias. Cosa rara, por cierto, salimos todos (un grupete de 5 personas) a tomar unas copas de helado (jajaja, si, capas) a kilkenis (no se escribe así ni me importa). El tema es que llegué a conocer a esta chica (la primera de la que hablé) y realmente me cayó muy bien. Más de uno de los que lee esto sabrá que eso es mucho para mí. La flaca tiene 26 años y… acá esta la joda… vive en Armenia (¿?). La mina va y viene de Armenia cada x meses para rendir materias en la facultad acá (¿les recuerdo que esto es Argentina?). Y para colmo casada. Todo bien con la mina, me paso el mail y toda la bola esa de “te escribo, me escribís, nos mantenemos en contacto” y todas esas gansadas que uno dice. Pero no logro entender como alguien puede irse de su país, siendo tu país Argentina. Esta bien, no estamos en el paraíso. Pero si mientras vivís acá, cada tanto podes tomarte un fernet mientras estas tirado en la pelopincho con unos centímetros de agua fresca… ¡¡¡ENCONTRASTE EL PARAÍSO!!!.

Me deprime el hecho de tener a esta mina tan lejos y todo lo que eso representa: toda una generación de personas que apostaron todo en otro lado del globo. Eso te hace pensar. Es decir… ¿y si me equivoqué yo? Tampoco es que tuve la posibilidad de rajarme, pero si la hubiese tenido no me iba ni en pedo. Si me equivoqué al menos será jugandome a la mia. Y al carajo con todo.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Tomó y corrió

Metallica - The Day That Never Comes

Creatividad Fugaz